Este chequeo es ideal para personas que sufren de enfermedad hepática y desean conocer su progreso, aquellos que tienen antecedentes familiares, o para los que quizás les gusta combinar todo tipo de alcohol y se sienten regios. Si hay dolor abdominal, coloración amarillenta en piel u ojos, comezón u orina oscura, es momento de poner atención.